sábado, 6 de noviembre de 2010

ILUSTRES CHARLATANES


- El mundo es intrincadamente complejo, paradójico y festivo. En él, drama y comedia marchan al alimón, la necesidad y frivolidad conviven promiscuamente burlándose una de la otra o ignorándose como si de universos paralelos se tratasen. Los protagonistas de esa parodia llamada mundo, gregarios por naturaleza – entre tantas otras virtuosas debilidades de las que puede presumir – se necesitan unos a otros mediante relaciones de diversa jerarquía; en la antigüedad, medioevo y en realidad hasta muy entrado el período industrial, el dominio del troglodita sobre el troglodita se establecía por la fuerza bruta y la espada, y a medida que el primate cúspide de la evolución iba mereciendo el ostentoso adjetivo de civilizado, los vínculos interpersonales se matizaron con mejorados modelos de sumisión del humano por el humano.
- Es que en mucho para bien y en no poco para mal, la naturaleza obsequió a su obra predilecta, el incomparable regalo de su peculiar neurología, ella que le permitió superar a bestias vecinas más fuertes, ágiles, rápidas y resistentes con el supremo don de la inteligencia, la misma que también se ha atormentado a sí misma con dioses, mitos y supersticiones, y junto a la inteligencia abstracta se nos legó el poder del habla y con ella el poder de la comunicación, el cual reforzado con el ímpetu y otros argumentos pertinentes la hicieron mas convincente hasta la mansedumbre obediente del congénere sin necesidad de disparar un cartucho.
- Surgieron entonces los humanos con habilidades verbales superlativas, portentos de astucia, capitalizadores de las carencias intelectuales, afectivas, informativas y las desesperanzas de sus masivos prójimos y capaces de arrastrarlos hacia despeñaderos del raciocinio. Lo mejor de todo – para ellos – es que tal festival del timo mediático se pudo traducir en muchos ceros a la derecha en sus cuentas o simplemente les otorgó un lugar infame y poco envidiable en la historia humana. Así nació el charlatán, maestro del engatusamiento y de la alquimia espiritual convirtiendo en oro contante y sonante la estupidez homínida.
- Estos tipos fundan religiones, sectas, actualizan cultos a la personalidad, proponen disparates de todo calibre cautivando multitudes de gaznápiros por millones. Si bien desde el mundo antiguo la creatividad humana y el temor ancestral al desamparo han sinergizado para crear prolíficamente, multitudes de divinidades y montañas de doctrinas infértiles en el enriquecimiento de la cultura humana; supercherías que terminan diluyéndose en su propia intrascendencia para bochorno de nuestra racionalidad conquistada en millones de años de evolución y luego de innumerables batallas contra el oscurantismo. No es una exageración decir que mientras la minusvalía en la sustancia gris humana exista en el mundo, los charlatanes tendrán asegurado el sustento y la supervivencia. Dice el pesimismo que cada minuto nace un tonto en el mundo. El siguiente es un sucinto recuento de algunas eminencias de tan ruin como rentable arte.